El 6º programa de MasterChef Uruguay tuvo momentos muy emotivos, sorpresas y un nuevo eliminado.

El primer desafío fue el de las cajas misteriosas, las mismas contenían una gran sorpresa. Cuando los 13 participantes en carrera las levantaron, descubrieron un plato vacío con una foto familiar. La consigna era buscar en sus raíces un plato que representara a la familia y demostrara sus orígenes. No hubo un solo participante que no se emocionara al contar quiénes estaban en las fotos y qué iban a cocinar.

Al final de la prueba, el jurado quedó muy conforme con el desempeño de todos los participantes. Sergio felicitó a los 13 aspirantes por los resultados obtenidos. Pero esto es una competencia y los platos mas sofisticados serían los destacados. Cinco aspirantes tuvieron buenas devoluciones y subieron al balcón, mientras que los ocho restantes tuvieron que enfrentar una nueva prueba de eliminación.

Para convencer al jurado y defender su delantal, los participantes tuvieron 60 minutos para cocinar con un ingrediente estrella y muy tradicional: dulce de membrillo Los Nietitos. Pero la prueba no era tan sencilla, la misma debería ser original y para ello cuatro participantes deberían prepara un plato dulce, y los cuatro restantes uno salado. Esta decisión no fue tomada al azar, Bailey -quién tuvo un excelente desempeño en la prueba anterior- tuvo la responsabilidad de designar que tipo de plato prepararían sus compañeros.

Bajo mucha presión y nervios, los aspirantes cocinaron sus platos ante la atenta mirada del jurado. Tomás y Magdalena fueron los que se sintieron más cómodos durante la prueba, ya que a ambos les tocó preparar un plato dulce con el membrillo.

Comenzaron las devoluciones y uno a uno, los participantes fueron subiendo al balcón. Para el final quedaron Luciana, Sofía y Gabriel y uno de ellos resultó ser el sexto eliminado de la competencia.

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